domingo, 3 de noviembre de 2013

Ed Motta: yo te avisé!




Cansado de recomendárselo a mis conocidos sin que nadie me de bola y felicite por la gauchada, otra vez recurro a mi blog a modo de descarga-consuelo/botella tirada al mar. Ed Motta, maestro brasileño del funk y el soul, tan poco difundido como inmenso músico, reciente visitante de nuestra Buenos Aires, melómano empedernido y gran conocedor y fana de nuestro rock  y jazz nacionales, es tan enorme que logró encontrar poesía en nuestro desastroso tren TBA-línea Mitre. Miren esto!


Sobrino del finado músico de culto Tim Maia, su disco más redondo y eficaz -a mi humilde entender- fue "Manual pratico para festas e afines vol. 1" de 1997.  Quizás su discografía no sea matemáticamente pareja pero es enteramente disfrutable. Y al actualizarme con sus últimos discos, "Piquenique" (2009) y "AOR" (2013), realmente me deleité con Motta otra vez.  

No tengo una certeza total pero me da la impresión que es el músico brasileño más sobresaliente de los últimos años, después del reinado de los más clásicos Tom Jobim, Joao Gilberto, Buarque, Caetano Veloso, incluso Djavan, Zimbo Trio y Eliane Elias: no encontrarán en Ed Motta mucho samba ni bossa pero seguro 'moverán el culo', como dirían sus admiradores Ilya Kuriaky & The Valderramas. Con cositas de Edu Lobo, de Hermeto Pascoal y reminiscencias de Jamiroquai.

Igualito que Spinetta o Manal, si Ed Motta hubiera nacido sajón y en el hemisferio norte, sería un músico millonario adorado por las elites. Un Steve Wonder o un Gino Vanelli para entendidos o un nuevo Steely Dan.

Aquí va una lista de mis temas preferidos -lógicamente subjetiva-, después una breve bio suya del sitio "Producciones animadas" e imperdibles reportajes que le hicieron en La Voz del Interior (Córdoba) y la revista Noticias, hace poco. Horanosaurus.

 Um contrato com Deus (1990)
"Ed Motta nació en Rio de Janeiro el 17 de agosto 1971 y recuerda perfectamente que a los 4 años su canción favorita era “You are the sunshine of my life”, de Stevie Wonder. A los siete años, el jovencísimo Motta ya estaba enamorado de los sonidos de la música disco que salían de los tocadiscos de sus hermanas mayores. Ahí empezó su pasión por coleccionar vinilos, vicio que todavía mantiene. Sobrino del cantante y compositor Tim Maia, creador de un soul con acento brasileño y carioca, tiene como primeros recuerdos la música del tío, los discos de samba-canção y bossa nova que sus padres Luzia y Antonio Carlos escuchaban, los éxitos de Earth, Wind & Fire, Stevie Wonder y de la música disco que estaba en vigor en la década del 70 y que su hermana Regina ya le hacía escuchar. Pero el gatillo para que esta natural pasión por la música se convirtiera en una obsesión de hecho fue el blues-rock británico: Thin Lizzy, Humble Pie, Led Zeppelin, Free, Rory Gallagher...

A principios de los años 80, Motta incorporó a sus gustos musicales el rock, a la vez que conseguía sus primeros bolos cantando con la banda de hard rock Kabbalah. Ed recuerda que fue entonces cuando escuchó a Jeff Beck: “fue como si me diesen una bofetada en la cara, devolviéndome a la música negra que había olvidado... recuerdo que sólo quería saber de blues/rock....y salí de la banda para intentar hacer ese sonido. Descubrí el disco "Blow by Blow" que me estremeció...” dice Motta.

Motta abandonó la escuela a los 16 años, y se dedicó a escribir sobre música negra, a ampliar su colección de vinilos y a organizar festivales de soul y funk en el Sound Museum de Rio de Janeiro.

No mucho tiempo más tarde trabajó como DJ y formó la banda de funk Conexao Japeri, tras conocer al guitarrista Luiz Fernando “Cumprido”, con quien grabó su primer disco en 1988. Fue una etapa de definición musical y de jam sessions por todo Rio. "Este período fué bastante agradable, a pesar de nunca haberme adaptado a la "democracia” de una banda... la obligación de trabajar en equipo en cuestiones relacionadas con el arte puede ser muy estresante... siempre quise trabajar sobre mis propias ideas". Entonces, su segundo disco fue en solitario. Consecuentemente, su segundo trabajo, “Um contracto com deus” lo mostró como productor, compositor, e instrumentalista.

Después de una colaboración con el artista jamaicano Steely Dan (*) para producir su álbum “Entre e ouca” –muy criticado en Brasil-, Motta se trasladó a Nueva York. Allí descubrió su faceta como gourmet y gourmand, lo que no sólo aumentó su cintura: consiguió ser crítico culinario en uno de los diarios más leídos de Sao Paulo y una de las autoridades sobre vino más respetadas en Brasil.

Ed Motta se sumergió en la escena jazzística de Nueva York e, irónicamente, lo hizo experimentando con la MPB (música popular brasileña). Cuando Ed volvió a Brasil compuso la banda sonora de “Pequeño Dicionario Amoroso” y comenzó a trabajar en el exitoso “Manual Pratico para festas, bailes e afins Vol 1” (1997), que enseguida consiguió ser doble disco de oro. Logró hacer una cosa popular de nivel, sofisticación y cuidado con el sabor de la simplicidad de sus primeros trabajos, pero con una capacidad técnica y  composición mayor y con un repertorio orientado al dance, sin por ello separarse del jazz y la música tradicional brasileña.

La década del '90 y principios del 2000, fueron frúctiferas en creación y giras tanto nacionales e internacionales, como el "show inolvidable" (según sus propias palabras) con Roy Ayers en Central Park de New York,  que lo posicionan en el medio como "profundo conocedor de música y multiinstrumentista".

El disco que llamó la atención de público y crítica de Motta en Europa fue “Dwitza” (2002). El disco contenía referencias de musicales de Broadway, bandas sonoras, jazz y MPB, que sus seguidores y críticos no lograron entender y apreciar del todo.

Ahora regresa la mercado europeo con “Poptical” (Trama Music), que incluye las letristas como Bluey (de Incognito), Seu Jorge y Daniel Carlomagno, que enfatizan el clima retro-futurista de la obra. El disco todo es un reencuentro con el género pop. Contiene muchas sesiones de cuerdas y metales, sintetizadores y sonoridades psicodélicas setentistas. (Producciones Animadas.com-11.02.07 y Lala Salamanca para Radio Universidad de Chile - 25.10.04)

(*) me parece que aquí el autor del artículo cometió un error: Steely Dan es un personaje de libro con el que se identificó un enorme grupo jazzy norteamericano liderado por Donald Fagen y Walter Becker. Que yo sepa no hay ningún artista de origen jamaiquino con ese nombre. Horanosaurus. 

"Ed Motta es, posiblemente, el talento más exuberante del Brasil desde los años 90. Influido por la mejor música de Norte América de los años 70, Ed también ha sabido beber de las fuentes musicales de su país natal, Brasil, y realizar con éxito una combinación entre ambas tradiciones. Así, la samba o la bossa nova se mezclan con el soul, el jazz y el funk. El resultado condujo, inevitablemente, a que Motta se convirtiese en uno de los artistas más respetados e influyentes de entre toda la generación de nuevos músicos brasileños. Durante su carrera musical, que se inició hace 15 años, Motta siempre ha apostado por crear música profunda, con corazón y alma. Es "Poptical", su última creación, un disco que es lo que sugiere: expresión artística en formato pop". Anubisaudio.com 

Ed Motta: el auténtico funk carioca llega a Córdoba

El brasileño Ed Motta regresa a Córdoba para presentar su elogiado último disco. Miércoles, en Plaza de la Música. La Voz del Interior. Por Rodrigo Rojas 23/09/13.

Este año, Ed Motta lanzó un disco exquisito. Una soberbia fusión de funk, jazz y rock titulada AOR, siglas que según explica el mismo Motta son un término norteamericano inventado en los años 70 que califica a la música de gran excelencia técnica. Y en la carrera del brasileño esto ha sido una constante. "La obsesión por el perfeccionismo es una cosa que ronda mi música desde siempre. Desde la época en la que aún vivía con mis padres, apenas pude juntar un poco de dinero ya había hecho un estudio de grabación en mi casa. Toda mi vida tuve esa idea del estudio propio y estar en contacto con ese mundo más técnico de la música, del sonido. Siempre me encantó eso y la excelencia técnica fue una búsqueda musical. Tanto como en la calidad de los músicos que me acompañan, como los "solos" de las canciones, que son una parte importante de los temas", cuenta Motta en la previa de su segunda visita a Córdoba.

-¿Creés que la gente percibe esa calidad de sonido? -Voy a citar al cineasta Billy Wilder que dijo en una entrevista que si las personas entraban en el cine y alguien se ponía a hablar de la fotografía de su película es porque él se había equivocado. Que él no había conseguido lograr su cometido. No quiero que se hable de las frecuencias de mi música o cuestiones técnicas, quiero que mi música sea absorbida de forma natural. La cuestión técnica es solo un problema mío (ríe), yo tengo que ingeniármelas para que sea lo mejor posible, pero no que sea pasible de análisis.

-¿Esa búsqueda también te impulsa a escuchar sólo música de calidad? -No, escucho de todo. Puedo escuchar un disco de blues o un disco de samba de Cartola, grabado de una forma más rustica, pero artísticamente brillante. Y también puedo escuchar un disco súper producido como Thriller de Michael Jackson.

Funk carioca

Desde hace una década, en Rio de Janeiro, la palabra "funk" está asociada a un movimiento musical que nació en las favelas y bajó con fuerza para conquistar hasta los barrios más nobles. Con una temática orientada hacia lo sexual y un sonido austero, el ritmo pegadizo se ha ganado tantos adeptos, como detractores. "El funk carioca o Miami bass, es algo reciente que nada tiene que ver con el de James Brown. Encuentro extremamente interesante que sea democrático, creo que es una expresión genuina de la clase trabajadora y sufrida. Tengo simpatía por ese género, no reclamo nada de ellos, sí reclamo de la clase más alta que tiene todas las condiciones de vida y podía hacer cosas mejores y simplemente vez a un tipo que toca la guitarrita en una bandita de rock cualquiera. A eso no le tengo respeto, más que a alguien de una favela que no sabe música y se expresa de esa forma honesta intelectualmente", cuenta.

-Decís vivir desconectado de la realidad, ¿qué implica eso? -Realmente no escucho la música de hoy, pero eso viene ya desde los años 80. Mientras hacía mi primer disco oía música de los 70 y nada de la época, por ejemplo a The Police comencé a escucharlos mucho después, en esa época los odiaba. Nunca me ha interesado lo que todos quieren oír, por caso, si voy a un restaurante y me dicen: "ese es el plato que sale", ese es el plato que no quiero.

-¿Y cuando sos vos el que te ponés de moda? ¿qué te pasa? -No, ¡ahí lo adoro! (ríe a carcajadas). Pero Infelizmente nunca probé eso, tuve épocas donde mi música en Brasil tuvo más aceptación comercial, pero nunca explotó. Nunca toque en uno de esos festivales enormes de 50 mil personas. Nunca fui de esos artistas, y eso tiene una ventaja y una desventaja. Nunca fui esclavo del mercado, ni tuve un patrón diciéndome lo que tengo que hacer y eso es una ventaja de libertad. Con menos dinero, pero se aprovecha más.

-La prensa especializada habla maravillas de este disco, ¿qué ocurre con el público? -El público lo acepta, aunque no es una aceptación popular. En términos populares donde ha tenido más aceptación este último disco es en Japón, donde toca en miles de radios. Mis discos siempre fueron elogiados por la crítica, pero ya me lo dijo el director de una grabadora cuando salió mi primer CD y fue muy elogiado por la prensa: cuando toda la prensa lo elogia es porque no va a vender (ríe). Y mi carrera siempre tuvo algo de eso.

-Invitaste a Dante Spinetta en el disco, ¿cómo surgió la idea? -Quería tener una canción en español, y cuando hacia el tema me acordaba de un tema de Litto Nebbia, así que pensé que tenía que tener letra en español y hecha por un argentino. Mi conexión con la música argentina es muy grande. Así pensé en Dante, de alguna manera también me siento un hijo de Spinetta.

-Además de Spinetta, ¿qué cosas oís de Argentina? -Millones, tengo una colección de vinilos argentinos enorme. Cosas de los 70 como Aquelarre, Crucis, La máquina de hacer pájaros, de Charly Garcia mismo, y con Sui Generis y Serú Giran. David Lebón... y otras cosas de tango modernos como Rodolfo Mederos o Rodolfo Alchourron.

ROCK SÓLO PARA ADULTOS
El extraño personaje Ed Motta

Es el más internacional de los músicos de Brasil y es fan de Argentina. Revista Noticias. 07/10/13. 
BONUS TRACK

 Queridos amigos: si no conocían a Motta y les interesó, me tomo el atrevimiento de pedirles que sigan confiando en mi, vayan abajo y descubran, por ej. a la inmensa Me´Shell Ndegeocello. Horanosaurus. 

Otras entradas del blog referidas al tema música/músicos:
Publicado por en
Etiquetas:

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)