Los términos "planificación" y "largo plazo" no existen para los políticos argentinos, a pesar que muchos ostentan títulos universitarios y son gente culturosa. Aprendieron mal o no se animan. La imprevisión la sufre también el sector energético, confiado por el gobierno al Arq. De Vido: su ministerio lleva el pomposo nombre de "Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios". A pesar que viene fracasando desde hace nueve años en casi todos los rubros que maneja. Por ejemplo los calamitosos ferrocarriles con sus muertes de trabajadores a cuestas, que fueron traspasados -como papa caliente- al Ministerio del Interior (1)
Se vendrá dentro de poco el debate por el yacimiento sureño Vaca Muerta, porque es uno de los pocos recursos que promete sacarnos de la crisis energética. Hay varios problemas: primero, nadie quiere poner dinero porque el gobierno no es confiable; las reservas del Banco Central tampoco alcanzan para eso. Y, además, su explotación requiere de técnicas extractivas muy fuertes que en muchos lugares del mundo están prohibidas. Saltarán como locos los ecologistas pidiendo garantías, con razón.
Me parece equilibrada la opinión del especialista Zajac (ver abajo) acerca de la explotación racional de los recursos energéticos que salven la escasez producida por los gobiernos menemistas y kirchneristas, que parecieron ceder siempre ante los grandes intereses, sin mirar más allá de las próximas elecciones. Aplaudieron las privatizaciones de los noventa y también las reestatizaciones populistas a cualquier precio (ver "Política energética K: ¡que se vayan todos!).
Ya lo mencionaba en otra entrada: la Argentina gasta en importación de combustibles fósiles más de lo que ingresa por nuestra enorme producción de soja, el "yuyo maldito" de la empecinada y mal asesorada señora presidente. Casi un tercio de las reservas que tiene el país, por año. Por esto, no renunció ni echaron ni encarcelaron a nadie.
El problema es que quienes deberían impulsar el debate de estos temas no saben consensuar ni suelen defender los derechos de los ciudadanos, menos todavía los de las generaciones futuras. Encima, no los podemos cambiar de la noche a la mañana porque la magia blanca no alcanza con ellos. Lamentablemente, son producto de esta misma sociedad, son un promedio de nosotros.
El otro ejemplo es el de la megaminería: los políticos en el poder no debaten ni consensúan. Los hechos demuestran que solo imponen su mayoría circunstancial para garantizar y participar del negocio con gobernadores muy poco confiables. A la gente que reclama garantías para su hábitat, palos y represión del gobierno autotitulado "nacional y popular". Horanosaurus.
Pino Solanas: “[El fracking] está prohibido en varios estados de los EE UU, en Francia, en varios países de Europa”
Yahoo Noticias. 06/02/13 - El método de fracturación
hidráulica utilizado para la exploración de gas y petroleo no convencional está en discusión en buena parte del mundo y
fue prohibido en algunos casos. “El fracking, hacer extracción de gas y de
petróleo en el subsuelo (...), en varios estados de los Estados Unidos, en
Francia, en varios países de Europa está prohibido”, denunció
en una entrevista en Radio Continental el diputado de Proyecto
Sur, Fernando “Pino” Solanas.
Efectivamente el debate sobre este tipo de exploración llevó a que se prohibieran o se declararan moratorias en varios países de Europa y algunos estados de Estados Unidos hasta que se cuente con mayor información y evaluaciones del impacto ambiental de la técnica.
Este método de extracción, utilizado para el gas y el petróleo no convencional, implica insertar un tubo varios kilómetros bajo tierra hasta alcanzar la roca que contiene el hidrocarburo, y luego instalar una tubería horizontal, perforada. A través de sus agujeros se lanza agua con arena y sustancias químicas a gran presión, para poder extraer los hidrocarburos. Quienes se oponen afirman que se trata de un procedimiento altamente contaminante por varias razones. Estas son algunas de ellas:
Efectivamente el debate sobre este tipo de exploración llevó a que se prohibieran o se declararan moratorias en varios países de Europa y algunos estados de Estados Unidos hasta que se cuente con mayor información y evaluaciones del impacto ambiental de la técnica.
Este método de extracción, utilizado para el gas y el petróleo no convencional, implica insertar un tubo varios kilómetros bajo tierra hasta alcanzar la roca que contiene el hidrocarburo, y luego instalar una tubería horizontal, perforada. A través de sus agujeros se lanza agua con arena y sustancias químicas a gran presión, para poder extraer los hidrocarburos. Quienes se oponen afirman que se trata de un procedimiento altamente contaminante por varias razones. Estas son algunas de ellas:
---Contaminación del agua: Parte del agua mezclada con químicos queda
debajo de la tierra, y se teme que pueda contaminar las napas y
acuíferos subterráneos, o que los hidrocarburos se filtren en el agua. Uno de
los casos emblemáticos es el de Wyoming, en los Estados Unidos. Allí la Agencia de Control Ambiental de los Estados
Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) encontró hidrocarburos en el agua y
algunos químicos asociados con el fracking. La empresa encargada de la
explotación alega que esos elementos se encontraban en el agua antes de que
comenzara la explotación de gas. La EPA decidió llevar a cabo un informe
detallado, cuya publicación está prevista para 2014, acerca de los posibles
impactos del procedimiento.
---Temblores: Este tipo de extracciones puede generar movimientos de tierra.
En el Reino Unido se declaró una moratoria para impedir el uso de esta técnica porque
se detectaron dos temblores provocados por la extracción de gas, pero luego
ella se levantó, al considerarse que si se toman las medidas adecuadas de
control la explotación es segura.
---Contaminación ambiental: Este tipo de extracción libera metano, uno de los gases que producen
el efecto invernadero, con propiedades más destructoras que el
CO2, como lo explica el ingeniero Víctor Bravo, especialista en fracking
de la Fundación Bariloche. Por otro lado, en el proceso de producción una práctica común es la quema de los gases de
desecho (flaring), lo que aumenta la emisión de partículas
tóxicas a la atmósfera. Un informe
de la Agencia de Evaluación Ambiental de los Países Bajos concluye que “según
observaciones satelitales, las emisiones resultantes del flaring en los Estados Unidos están
aumentando, con una fuerte suba del 50% en 2011. La causa principal es el
marcado aumento del uso del fracking hidráulico o fracking para la producción
de shale oil.”
---Legalidad en el mundo: En Europa se prohibió en varios países. Desde
2011, en Francia esta práctica es ilegal, al
igual que en Bulgaria.
En Alemania un proyecto de ley para prohibirlo fracasó, pero el estado de
Renania del Norte-Westfalia, el más rico en este recurso, declaró una
moratoria. En el Reino Unido se levantó una moratoria en diciembre
pasado y en España algunas provincias, como Cantabria, están en el proceso de prohibir estas
explotaciones. En los Estados Unidos se mantiene el
debate, y la situación depende de cada estado. El estado de Vermont
fue el primero que prohibió la práctica, pero varios estados decidieron impedir
su uso hasta tener pruebas de que no es altamente dañino para el medio
ambiente. Es el caso de Nueva York y de Maryland. En la Argentina no existe una
legislación nacional sobre el tema. Solanas presentó un proyecto
de ley para prohibirlo. A nivel provincial existen algunas normativas,
específicamente en Neuquén, donde está regulado el uso del agua y su
tratamiento posterior.
---Potencial energético: El alto precio del petróleo ha
hecho rentable este tipo de explotaciones, más caras que las tradicionales. La Argentina tiene los terceros recursos más grandes
del mundo de gas no convencional, después de China y Estados Unidos,
según la Administración de Información sobre Energía de los Estados Unidos
(EIA, por sus siglas en inglés).
Los recursos se encuentran en su mayoría
en Neuquén, pero abarcan también partes de Chubut, Santa Cruz y
Tierra del Fuego, y se realizan exploraciones en otras partes del país como
Mendoza y la Cuenca Chacoparanense (que incluye a Misiones, Entre Ríos, Chaco,
Santiago del Estero, Santa Fe, Corrientes, Córdoba y Formosa). Los recursos fueron estimados por la EIA en 774 billones
de pies cúbicos (TCF), lo cual, al consumo anual de gas de 2009, que fue de
1,52 TCF, equivaldría a 509 años de consumo del país.
Clarín
13/06/13 - Opinión. Por Héctor Zajac. Geógrafo UBA. Magister Univ. de Nueva York. La explotación
de petróleo y shale gas abre oportunidades al país, pero presenta también
aristas negativas por su carácter potencialmente contaminante. Se debe poder
conciliar el riesgo ambiental inherente a la expansión del sector energético
con las necesidades de los actores excluidos.
El acuerdo para la explotación de petróleo y gas shale es una buena noticia. Primero porque une lo que la nación tiene de sobra con lo que le falta: un enorme stock de recursos naturales (posee la tercera reserva mundial de gas y petróleo shale del mundo), con los capitales necesarios para explotarlos y las políticas de largo plazo implicadas en emprendimientos de esta magnitud. Luego, porque los 14.000 millones de dólares anuales que se erogan en importación de energía son una pesada mochila, que compromete la economía en mucho mayor medida que cualquier otra vía de fuga de divisas.
Sin embargo hay aristas negativas: la novedosa técnica involucra perforaciones horizontales de varios kilómetros de largo, la inyección de enormes volúmenes de agua a grandes presiones y de químicos para fracturar las rocas y liberar el mineral. Lo que la hace más costosa y contaminante. Prohibida en Francia y controversial en Canadá y Estados Unidos, donde se presentaron miles de demandas contra el Estado y los privados; en la Patagonia, la superposición territorial entre los yacimientos, con los escasos acuíferos subterráneos necesarios para su explotación, y un colectivo vulnerable que depende de ese agua para sobrevivir, genera un serio conflicto de intereses.
En Vaca Muerta, la comunidad mapuche de “Gelay Co” que irónica o proféticamente significa “sin agua” y que vive sobre y del acuífero de Zapala -declarado reserva natural por la provincia- demandó a la compañía que llevó a cabo la primera explotación shale en el área y ocupó parte de una planta en protesta por la negativa a consultar con sus “Loncos” y en reclamo de un estudio de impacto ambiental que establezca los químicos utilizados, información que -indica la empresa- está amparada por secreto de patente. La protesta fue suprimida y sus organizadores, objeto de acciones legales.
Eventos similares ocurrieron en Chubut y en Río Negro, donde en Cinco Saltos la municipalidad prohibió la actividad, acto que fue vetado luego por el propio gobierno y la asamblea legislativa.
El crecimiento económico suele llevarse mal con el ambiente. La industrialización requiere de la eficiencia de los combustibles fósiles altamente contaminantes y de capitales que en procura de menores costos “premian” a las naciones que mas ignoran a su naturaleza y su sociedad fluyendo a los sitios donde los controles son laxos o no existen y los salarios, más bajos.
La reciente tragedia de Bangladesh es hija de esta lógica. En nuestro país la expansión de la frontera agrícola, resultado del boom de la soja de los últimos años, “se lleva puestos” bosques y montes originales de enorme potencial ecológico. Conforme avanza, las poblaciones que han habitado los territorios durante años (pueblos originarios y marginales rurales) son expulsadas de manera violenta. Confinados a las peores tierras, los que permanecen sufren la desertificación que -sobre suelos ya degradados- produce la alteración en el ciclo del agua que provocan los desmontes. Un cambio es difícil. Las retenciones financian al modelo. Además, muchos de los abusos ambientales y sociales ocurren en provincias leales al Gobierno y que constituyen parte de su base de sustentación política. Sin embargo, no se puede dejar pasar esta oportunidad histórica: habrá que avanzar con cuidado. El tema requiere un perentorio y postergado debate acerca de la identificación de las mejores políticas para conciliar el riesgo ambiental inherente a la expansión del sector energético con las necesidades de los actores excluidos.
La vinculación entre el conocimiento científico y la gestión juega aquí un rol esencial para marcar posibilidades y límites o para identificar y diseñar mecanismos de control del daño si el impacto ambiental se justifica como en este caso. Un desafío enorme que -sin duda- vale la pena.
El acuerdo para la explotación de petróleo y gas shale es una buena noticia. Primero porque une lo que la nación tiene de sobra con lo que le falta: un enorme stock de recursos naturales (posee la tercera reserva mundial de gas y petróleo shale del mundo), con los capitales necesarios para explotarlos y las políticas de largo plazo implicadas en emprendimientos de esta magnitud. Luego, porque los 14.000 millones de dólares anuales que se erogan en importación de energía son una pesada mochila, que compromete la economía en mucho mayor medida que cualquier otra vía de fuga de divisas.
Sin embargo hay aristas negativas: la novedosa técnica involucra perforaciones horizontales de varios kilómetros de largo, la inyección de enormes volúmenes de agua a grandes presiones y de químicos para fracturar las rocas y liberar el mineral. Lo que la hace más costosa y contaminante. Prohibida en Francia y controversial en Canadá y Estados Unidos, donde se presentaron miles de demandas contra el Estado y los privados; en la Patagonia, la superposición territorial entre los yacimientos, con los escasos acuíferos subterráneos necesarios para su explotación, y un colectivo vulnerable que depende de ese agua para sobrevivir, genera un serio conflicto de intereses.
En Vaca Muerta, la comunidad mapuche de “Gelay Co” que irónica o proféticamente significa “sin agua” y que vive sobre y del acuífero de Zapala -declarado reserva natural por la provincia- demandó a la compañía que llevó a cabo la primera explotación shale en el área y ocupó parte de una planta en protesta por la negativa a consultar con sus “Loncos” y en reclamo de un estudio de impacto ambiental que establezca los químicos utilizados, información que -indica la empresa- está amparada por secreto de patente. La protesta fue suprimida y sus organizadores, objeto de acciones legales.
Eventos similares ocurrieron en Chubut y en Río Negro, donde en Cinco Saltos la municipalidad prohibió la actividad, acto que fue vetado luego por el propio gobierno y la asamblea legislativa.
El crecimiento económico suele llevarse mal con el ambiente. La industrialización requiere de la eficiencia de los combustibles fósiles altamente contaminantes y de capitales que en procura de menores costos “premian” a las naciones que mas ignoran a su naturaleza y su sociedad fluyendo a los sitios donde los controles son laxos o no existen y los salarios, más bajos.
La reciente tragedia de Bangladesh es hija de esta lógica. En nuestro país la expansión de la frontera agrícola, resultado del boom de la soja de los últimos años, “se lleva puestos” bosques y montes originales de enorme potencial ecológico. Conforme avanza, las poblaciones que han habitado los territorios durante años (pueblos originarios y marginales rurales) son expulsadas de manera violenta. Confinados a las peores tierras, los que permanecen sufren la desertificación que -sobre suelos ya degradados- produce la alteración en el ciclo del agua que provocan los desmontes. Un cambio es difícil. Las retenciones financian al modelo. Además, muchos de los abusos ambientales y sociales ocurren en provincias leales al Gobierno y que constituyen parte de su base de sustentación política. Sin embargo, no se puede dejar pasar esta oportunidad histórica: habrá que avanzar con cuidado. El tema requiere un perentorio y postergado debate acerca de la identificación de las mejores políticas para conciliar el riesgo ambiental inherente a la expansión del sector energético con las necesidades de los actores excluidos.
La vinculación entre el conocimiento científico y la gestión juega aquí un rol esencial para marcar posibilidades y límites o para identificar y diseñar mecanismos de control del daño si el impacto ambiental se justifica como en este caso. Un desafío enorme que -sin duda- vale la pena.
Por Luis Stinco CONSULTOR Y
DOCENTE DE LA UBA Y EL ITBA. Clarín IEco 23/06/13. La fractura hidráulica consiste en la inyección de un
fluido (normalmente agua) en conjunto con un material o agente de sostén (arena
o cerámica de forma esférica) a una presión tal que produce la disgregación de
la roca. Cuando se fractura la roca, se generan nuevos espacios (porosidad) y
se interconectan los preexistentes de manera tal que se favorece la capacidad
de movimiento de los fluidos.
La fractura debería cerrarse como respuesta a los esfuerzos actuantes ni bien se deja de aplicar presión, sin embargo, el material de sostén evita que esto suceda dado que permanece dentro de la fractura imposibilitando su cierre, preservando la integridad de la roca y facilitando el movimiento del gas, petróleo y agua hacia el pozo. En reservorios convencionales, esta misma tecnología se utiliza para mejorar la productividad y en no convencionales, son esenciales para que los hidrocarburos puedan fluir.
La fractura hidráulica es una operación con más de 70 años de historia, común en reservorios convencionales y extendida en los no convencionales. En estos últimos, se requiere un mayor volumen de agua, productos químicos y cantidad de fracturas por pozo. Las compañías son responsables y cuentan con la capacidad técnica y humana para evitar impactar negativamente el medioambiente. La perforación de un pozo tiene por objetivo primordial producir hidrocarburos de manera rentable, segura y preservando el medioambiente. Es posible que los volúmenes de producción no sean los esperados, por lo que para revertir esta situación se realiza una estimulación mediante la aplicación de ácidos o fracturas.
La fractura debería cerrarse como respuesta a los esfuerzos actuantes ni bien se deja de aplicar presión, sin embargo, el material de sostén evita que esto suceda dado que permanece dentro de la fractura imposibilitando su cierre, preservando la integridad de la roca y facilitando el movimiento del gas, petróleo y agua hacia el pozo. En reservorios convencionales, esta misma tecnología se utiliza para mejorar la productividad y en no convencionales, son esenciales para que los hidrocarburos puedan fluir.
La fractura hidráulica es una operación con más de 70 años de historia, común en reservorios convencionales y extendida en los no convencionales. En estos últimos, se requiere un mayor volumen de agua, productos químicos y cantidad de fracturas por pozo. Las compañías son responsables y cuentan con la capacidad técnica y humana para evitar impactar negativamente el medioambiente. La perforación de un pozo tiene por objetivo primordial producir hidrocarburos de manera rentable, segura y preservando el medioambiente. Es posible que los volúmenes de producción no sean los esperados, por lo que para revertir esta situación se realiza una estimulación mediante la aplicación de ácidos o fracturas.
Petroleras extranjeras, con privilegios
Por Félix Herrero-Pte. del Instituto de Proyectos de Proyecto Sur (IPPS). Clarín 04/08/12.
El potencial de Vaca Muerta: ¿por qué no llegan inversiones?
La zona está repleta de shale gas y shale oil, pero se requieren unos US$37.000 millones para su extracción, que aún no aparecen. Clarín IEco 23/06/13. Por Damián Kantor.
Shale gas, ¿mito o realidad?
Clarín 22/04/12 - Sección El color del dinero, por Silvia Naishtat. Con la estatización de YPF, el nombre Vaca Muerta cobró popularidad. Esa formación rocosa de la cuenca neuqina apareció como la joya de la corona de la petrolera expropiada. Y hasta considerada por la agencia geológica de EE.UU. una de las promesas por sus reservas en gas no convencional (...)
(1) Como
el dinero para obra pública se maneja discrecionalmente desde la Casa Rosada -para domesticar políticamente
a gobernadores e intendentes provinciales- Julio De Vido se puede
encargar de las cloacas de Perico en Jujuy, una canalización en la Añatuya santiagueña o de un dique en Chubut.
Se sabe que también hasta lleva alegría a la gente -con los fondos públicos que maneja- mandando los costosos recitales de Fito Páez, León Gieco y tantos otros
artistas revolucionarios donde el modelo lo requiera. Las malas lenguas dicen que De Vido fue un recaudador de la primera hora de Néstor Kirchner, cuando acompañaba sus gobernaciones en el sur. Es también un ultra-defensor de la cuestionada megaminería en la Argentina. Está (o estuvo) asesorado por un "prócer" no suficientemente reconocido:
Roberto Dromi, el arquitecto de las privatizaciones menemistas de los
noventa. También prohijó al benemérito Ricardo Jaime, ex-secretario de
Transporte, de destacada actuación (recaudatoria). De Vido zafó de un juicio por enriquecimiento ilícito hace relativamente poco. Claro que justamente su
esposa Alessandra Miniccelli (socia del matrimonio Moreno) manejó todos estos años la SIGEN, organismo encargado de controlar al ministro. ¡Quizás le tuvo alguna consideración! Gente adinerada con mucha sensibilidad social.
BONUS TRACK:
cuando presenté esta entrada ya se había hecho el contubernio del gobierno con la multinacional Chevron pero aún no habían surgido mayores repercusiones públicas, por eso me parecía interesante analizar las opiniones acerca del aspecto tecnológico y ambiental de la explotación del yacimiento Vaca Muerta. Caía de maduro la discusión porque afectará a gente de carne y hueso y recursos naturales. No parecía importarle a la mayoría la falta de tratamiento parlamentario: de algún modo este gobierno populista nos tiene acostumbrados a la falta de institucionalidad. En un país normal, un decretazo como el usado no podría pasar una justicia independiente. La presidente Cristina Fernández de Kirchner olvidó sus supuestas convicciones nacionalistas de cuando estatizó YPF y proclamó ante su corte de focas aplaudidoras el convenio con la incumplidora Chevron, haciendo referencia a la oposición con la guaranga afirmación "parecen la gata Flora" atajándose de antemano porque consiguió inversores tan poco potables, entre gallos y medianoche, traicionándose a si misma y burlándose de su tropa. A mi me produce verguenza ajena. Horanosaurus.
BONUS TRACK:
cuando presenté esta entrada ya se había hecho el contubernio del gobierno con la multinacional Chevron pero aún no habían surgido mayores repercusiones públicas, por eso me parecía interesante analizar las opiniones acerca del aspecto tecnológico y ambiental de la explotación del yacimiento Vaca Muerta. Caía de maduro la discusión porque afectará a gente de carne y hueso y recursos naturales. No parecía importarle a la mayoría la falta de tratamiento parlamentario: de algún modo este gobierno populista nos tiene acostumbrados a la falta de institucionalidad. En un país normal, un decretazo como el usado no podría pasar una justicia independiente. La presidente Cristina Fernández de Kirchner olvidó sus supuestas convicciones nacionalistas de cuando estatizó YPF y proclamó ante su corte de focas aplaudidoras el convenio con la incumplidora Chevron, haciendo referencia a la oposición con la guaranga afirmación "parecen la gata Flora" atajándose de antemano porque consiguió inversores tan poco potables, entre gallos y medianoche, traicionándose a si misma y burlándose de su tropa. A mi me produce verguenza ajena. Horanosaurus.
Chevron, Chevron, que grande sos. Por Jorge Lanata. Clarín 20/07/13.
Pino Solanas calificó como una 'operación infame' el acuerdo entre YPF y Chevron. La Nación 18/07/13.
"(el acuerdo con Chevron) es una verdadera estafa! Es inconstitucional. Por eso plantearemos una acción de amparo ante la Justicia. Ese acuerdo viola en cuatro oportunidades la ley vigente de hidrocarburos. La ley dice que las concesiones no deben extenderse más de 25 años y el de Chevron es de 35 años. No hubo llamado a licitación internacional y no se paga canon alguno". Pino Solanas (La Nación 03/08/13)
"(el acuerdo con Chevron) es una verdadera estafa! Es inconstitucional. Por eso plantearemos una acción de amparo ante la Justicia. Ese acuerdo viola en cuatro oportunidades la ley vigente de hidrocarburos. La ley dice que las concesiones no deben extenderse más de 25 años y el de Chevron es de 35 años. No hubo llamado a licitación internacional y no se paga canon alguno". Pino Solanas (La Nación 03/08/13)
Por Antonio Rossi. Clarín
04/08/13. Cuestionan las cláusulas secretas y aseguran que no
cumple con la ley de Hidrocarburos.
El acuerdo YPF-Chevron y el traje regulatorio “a medida” que aprobó el Gobierno para las inversiones en hidrocarburos no convencionales acumularon nuevos cuestionamientos y reclamos de los ex secretarios de Energía. Por medio de un documento conjunto, los ex timoneles del área energética advirtieron que resulta “inadmisible” que se mantengan en secreto las claúsulas del convenio y que la ampliación de las concesiones que exigen las petroleras no se puede concretar con la Ley de Hidrocaburos vigente. Tras destacar que “siendo YPF una empresa controlada por el Estado, las reservas de la negociación con Chevron deberían ceder por razones de interés público”, el nuevo trabajo de los ex secretarios alertó que resulta “improcedente otorgar nuevas concesiones a 35 años” porque van en contra de los artículos 27 a 38 de la Ley de Hidrocarburos y están alcanzadas por la nulidad que establece el articulo 79 de dicha norma. Según plantea el informe, el área que van explotar YPF y Chevron forma parte de una concesión de YPF que ya fue prorrogada y que tiene un plazo de vencimiento determinado. Pero el acuerdo firmado desconoce esa situación y exige el otorgamiento de una nueva concesión por 35 años que no se ajusta a las normas vigentes. El documento –que se dará a conocer públicamente mañana– sostiene que para el desarrollo de Vaca Muerta “se deben convocar a empresas locales e internacionales y en un marco de políticas que habiliten opciones y permitan a la Argentina y a YPF negociar en condiciones de fortaleza”. Los ex secretarios Emilio Apud, Julio César Aráoz, Enrique Devoto, Roberto Echarte, Alieto Guadagni, Jorge Lapeña, Daniel Montamat y Raúl Olocco destacaron que “resulta improvisado y preocupante el anuncio del Gobierno sobre la construcción de nuevas centrales nucleares por US$ 42.000 millones en los próximos 10 años”. Tras resaltar que “no se conocen los estudios, ni las fuentes de recursos para analizar la factibilidad de esos proyectos”, los especialistas le reclamaron al ministro Julio De Vido que informe en qué estado se encuentran Atucha II y la modernización de Embalse y cuánto se lleva gastado en esas obras. “No haber construido a tiempo la infraestructura portuaria y de almacenamiento convirtió al país en un importador ineficiente y poco transparente de gas natural licuado (GNL). Importamos a precios cercanos a US$ 17 el millón de BTU, cuando otros países de la región lo hacen a precios inferiores”, precisó el documento. Agregó que “es una paradoja que se exporte petróleo crudo y se importen productos refinados en cantidades cada vez mayores. Y un contrasentido que, teniendo una riqueza hidroeléctrica no aprovechada, se utilice la energía térmica generada en forma ineficiente con equipos pequeños que consumen combustibles importados”. Tras resaltar que los subsidios energéticos ya representan el 4% del PBI, los ex secretarios remarcaron que “la recomposición gradual de las tarifas sigue postergada por especulaciones cortoplacistas, mientras que por los combustibles importados se pagan precios internacionales crecientes que complican las cuentas externas y aceleran la emisión inflacionaria”.
El acuerdo YPF-Chevron y el traje regulatorio “a medida” que aprobó el Gobierno para las inversiones en hidrocarburos no convencionales acumularon nuevos cuestionamientos y reclamos de los ex secretarios de Energía. Por medio de un documento conjunto, los ex timoneles del área energética advirtieron que resulta “inadmisible” que se mantengan en secreto las claúsulas del convenio y que la ampliación de las concesiones que exigen las petroleras no se puede concretar con la Ley de Hidrocaburos vigente. Tras destacar que “siendo YPF una empresa controlada por el Estado, las reservas de la negociación con Chevron deberían ceder por razones de interés público”, el nuevo trabajo de los ex secretarios alertó que resulta “improcedente otorgar nuevas concesiones a 35 años” porque van en contra de los artículos 27 a 38 de la Ley de Hidrocarburos y están alcanzadas por la nulidad que establece el articulo 79 de dicha norma. Según plantea el informe, el área que van explotar YPF y Chevron forma parte de una concesión de YPF que ya fue prorrogada y que tiene un plazo de vencimiento determinado. Pero el acuerdo firmado desconoce esa situación y exige el otorgamiento de una nueva concesión por 35 años que no se ajusta a las normas vigentes. El documento –que se dará a conocer públicamente mañana– sostiene que para el desarrollo de Vaca Muerta “se deben convocar a empresas locales e internacionales y en un marco de políticas que habiliten opciones y permitan a la Argentina y a YPF negociar en condiciones de fortaleza”. Los ex secretarios Emilio Apud, Julio César Aráoz, Enrique Devoto, Roberto Echarte, Alieto Guadagni, Jorge Lapeña, Daniel Montamat y Raúl Olocco destacaron que “resulta improvisado y preocupante el anuncio del Gobierno sobre la construcción de nuevas centrales nucleares por US$ 42.000 millones en los próximos 10 años”. Tras resaltar que “no se conocen los estudios, ni las fuentes de recursos para analizar la factibilidad de esos proyectos”, los especialistas le reclamaron al ministro Julio De Vido que informe en qué estado se encuentran Atucha II y la modernización de Embalse y cuánto se lleva gastado en esas obras. “No haber construido a tiempo la infraestructura portuaria y de almacenamiento convirtió al país en un importador ineficiente y poco transparente de gas natural licuado (GNL). Importamos a precios cercanos a US$ 17 el millón de BTU, cuando otros países de la región lo hacen a precios inferiores”, precisó el documento. Agregó que “es una paradoja que se exporte petróleo crudo y se importen productos refinados en cantidades cada vez mayores. Y un contrasentido que, teniendo una riqueza hidroeléctrica no aprovechada, se utilice la energía térmica generada en forma ineficiente con equipos pequeños que consumen combustibles importados”. Tras resaltar que los subsidios energéticos ya representan el 4% del PBI, los ex secretarios remarcaron que “la recomposición gradual de las tarifas sigue postergada por especulaciones cortoplacistas, mientras que por los combustibles importados se pagan precios internacionales crecientes que complican las cuentas externas y aceleran la emisión inflacionaria”.
RECURSOS NO CONVENCIONALES
Un nuevo Horizonte
Energético
Solicitada del Instituto Argentino del Petróleo y del Gas
- Domingo 01-09-2013
La Argentina cuenta con inmensos recursos no
convencionales. Informes internacionales la ubican en el 2do puesto a nivel
mundial en gas y el 4to puesto en petróleo. Esto equivale a aumentar en 25
veces el potencial de los hidrocarburos que existen hoy en el país,
garantizando la energía para los próximos 100 años. La única diferencia que
existe con el petróleo y gas que conocemos, es la técnica de extracción, que
requiere utilizar arena y agua a alta presión. En otras formaciones existentes
en el país, Vaca Muerta es nuestro mayor
reservorio de hidrocarburos no convencionales. Por su extensión, espesor y
riqueza está considerada superior a otras formaciones del resto del mundo.
¿Es necesario producir más energía? SI. Un país precisa energía para crecer y desarrollarse y El 85% de la energía en la Argentina proviene del petróleo y el gas. Los hidrocarburos están presentes en la electricidad, el transporte, calefacción y en un sinfín de productos y objetos de nuestra vida cotidiana.
¿El desarrollo de este nuevo potencial, generará más empleo? SI. Miles de personas trabajan hoy vinculadas a esta industria en todo el país. El desarrollo de estos nuevos recursos necesitará de más profesionales, técnicos y un sinfín de nuevos proveedores de bienes y servicios.
¿Tendrá impacto positivo en las economías regionales? SI. Los ejemplos en el mundo demuestran que la gran actividad que genera este tipo de desarrollo, precisa contar con más mano de obra, recursos e infraestructura local, incluso que la producción convencional.
¿Puede esta tecnología desarrollarse en la Argentina? SI. Nuestro país cuenta con el conocimiento y la tecnología para llevar adelante este proceso. Y esto se expandirá aún más con el trabajando conjuntamente con universidades y centros de investigación
Mitos y verdades sobre el Shale
¿La estimulación hidráulica pone en riesgo las napas de agua? NO. En la Argentina, los acuíferos de agua dulce se encuentran a un máximo de 300 mts de profundidad, separados por no menos de 2 km de roca de los hidrocarburos no convencionales (shale) que se encuentra muchos más profundos. Además los pozos se protegen con entubamiento de acero y cemento que impiden cualquier contacto con el agua.
¿Es necesario producir más energía? SI. Un país precisa energía para crecer y desarrollarse y El 85% de la energía en la Argentina proviene del petróleo y el gas. Los hidrocarburos están presentes en la electricidad, el transporte, calefacción y en un sinfín de productos y objetos de nuestra vida cotidiana.
¿El desarrollo de este nuevo potencial, generará más empleo? SI. Miles de personas trabajan hoy vinculadas a esta industria en todo el país. El desarrollo de estos nuevos recursos necesitará de más profesionales, técnicos y un sinfín de nuevos proveedores de bienes y servicios.
¿Tendrá impacto positivo en las economías regionales? SI. Los ejemplos en el mundo demuestran que la gran actividad que genera este tipo de desarrollo, precisa contar con más mano de obra, recursos e infraestructura local, incluso que la producción convencional.
¿Puede esta tecnología desarrollarse en la Argentina? SI. Nuestro país cuenta con el conocimiento y la tecnología para llevar adelante este proceso. Y esto se expandirá aún más con el trabajando conjuntamente con universidades y centros de investigación
Mitos y verdades sobre el Shale
¿La estimulación hidráulica pone en riesgo las napas de agua? NO. En la Argentina, los acuíferos de agua dulce se encuentran a un máximo de 300 mts de profundidad, separados por no menos de 2 km de roca de los hidrocarburos no convencionales (shale) que se encuentra muchos más profundos. Además los pozos se protegen con entubamiento de acero y cemento que impiden cualquier contacto con el agua.
¿La estimulación hidráulica
compromete el abastecimiento de agua? NO. En el desarrollo de
cada pozo se utiliza agua durante dos dias como máximo. Y los volúmenes son muy
inferiores a los que se utilizan en otras actividades. En Neuquén se utilizará menos del
0,1% del caudal de los ríos frente al 5% que utiliza para el riego, la
industria y el consumo humano. El 95% restante desagua en el mar.
¿Se utilizan cientos de químicos peligrosos? NO. Se utilizan solo de 3 a 12 aditivos, en concentraciones muy bajas y la mayoría se usan en nuestra vida cotidiana por Ej: en los helados y dulces, en cosmeticos, quesos, bebidas, artículos de higiene y limpieza. Además, estos aditivos nunca entran en contacto con el medio ambiente.
¿La estimulación hidráulica provoca terremotos? NO. La vibración que provoca esta actividad es 100.000 veces a lo perceptible por el ser humano. Con decenas de miles de pozos perforados de este tipo no se ha comprobado en ningún caso que provoquen terremotos.
¿En un documental se muestra como la estimulación contamina el agua potable? ¿Es cierto?
NO. En los casos que se detectó presencia de gas en el agua se comprobó que era de origen biogénico (natural). En Estados Unidos, el país con mayor desarrollo de esta tecnología, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) luego de números estudios no encontró pruebas de que esta tecnología afecte el medio ambiente.
¿El shale está prohibido en casi todos los paises? NO. Solo fue prohibido en Francia y Bulgaria que no tienen ningún antecedente en la perforación de este tipo de pozos. Gran Bretaña, que había declarado una moratoria, decidió levantarla.
BONUS TRACK
Daños colaterales del boom: los sismos
Sub-nota del artículo "Una nueva OPEP está naciendo: Estados Unidos" por New York Times especial para Clarín IEco 03/05/15.
"El Servicio Geológico de los EE.UU. divulgó en abril su primera evaluación integral del nexo entre miles de terremotos y la operatoria petrolera, mapeando 17 regiones en las que se han producido terremotos. El informe es la declaración más amplia hasta el momento acerca de un peligro que ha crecido junto la producción energética del país. Por lejos, el estado más afectado, según el informe, es Oklahoma, donde los terremotos son cientos de veces más frecuentes de lo que lo eran hasta hace pocos años, debido al descarte de agua residual de la extracción de combustibles y de pozos de perforación mediante inyección de agua en la tierra. Pero el informe también localizó zonas de otros ocho estados, desde el lago Erie hasta las Rocosas, donde dicha práctica ha causado sismos. 'En Oklahoma solía haber uno o dos temblores por año de magnitud 3 o mayor y ahora hay uno o dos por día', dijo Mark Petersen, el autor jefe del informe. 'Ahora Oklahoma tiene más temblores de esa magnitud que California'. El informe salió dos días después que el gobierno de Oklahoma reconociera por primera vez el consenso de la comunidad científica según el cual el descarte de agua residual relacionado con la perforación petrolera es causa del enorme aumento de temblores allí. El estado presentó un mapa interactivo que muestra la ubicación de sismos y de lugares donde se inyecta agua residual en el terreno. La fractura hidráulica, técnica de perforación mediante la cual se inyecta a alta presión una mezcla de agua y químicos en el suelo para romper rocas y liberar gas, ha atraído vasta atención. Pero la inyección de agua para eliminar los residuos de la perforación o la producción ha contribuido mucho más a causar sismos. El informe federal excluyó actividades humanas, como las excavaciones mineras, que puede provocar temblores pero no utilizan inyección de fluidos en gran escala".
Otras entradas sobre el tema en este blog:
¿Se utilizan cientos de químicos peligrosos? NO. Se utilizan solo de 3 a 12 aditivos, en concentraciones muy bajas y la mayoría se usan en nuestra vida cotidiana por Ej: en los helados y dulces, en cosmeticos, quesos, bebidas, artículos de higiene y limpieza. Además, estos aditivos nunca entran en contacto con el medio ambiente.
¿La estimulación hidráulica provoca terremotos? NO. La vibración que provoca esta actividad es 100.000 veces a lo perceptible por el ser humano. Con decenas de miles de pozos perforados de este tipo no se ha comprobado en ningún caso que provoquen terremotos.
¿En un documental se muestra como la estimulación contamina el agua potable? ¿Es cierto?
NO. En los casos que se detectó presencia de gas en el agua se comprobó que era de origen biogénico (natural). En Estados Unidos, el país con mayor desarrollo de esta tecnología, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) luego de números estudios no encontró pruebas de que esta tecnología afecte el medio ambiente.
¿El shale está prohibido en casi todos los paises? NO. Solo fue prohibido en Francia y Bulgaria que no tienen ningún antecedente en la perforación de este tipo de pozos. Gran Bretaña, que había declarado una moratoria, decidió levantarla.
Artículo publicado en el Periódico de la CTA
Nº 107, corrspondiente a los meses de noviembre-diciembre 2014.
Exactamente el día en que el Congreso Nacional
Argentino daba por aprobada la nueva Ley de Hidrocarburos, en Pensilvania,
Estados Unidos, eran detenidos una cantidad importante de activistas que vienen
oponiéndose, hace tiempo ya a la extensión de la extracción de hidrocarburos no
convencionales por el llamado método fracking.
La
ley que en Argentina posibilita la ampliación de la extracción de los
hidrocarburos no convencionales, con el método llamado fracking o fractura
hidráulica, es resistido hace tiempo ya, en el corazón mismo de EE.UU. y en
gran parte de los países de Europa, como así también, con gran persistencia y
una intervención bastante importante, de las comunidades afectadas en la misma
Rusia.
La
competencia por el dominio energético a nivel mundial, lleva a los Estados
Unidos y a sus corporaciones más importantes, a afectar, inclusive, parte de su
territorio, incluidas poblaciones enteras que sufren la contaminación de estas
compañías.
La
comunidad de víctimas del gas(Gas vetscomunities) del Estado de Pensilvania, a
través de uno de sus activistas, Craigs Stevens, en un documental de RT
Televisión de diciembre de 2011, denunciaba el incremento de los sismos y la
contaminación de las aguas, por la práctica del fracking, además del gran
negocio de las corporaciones en torno de esta intensiva forma de extracción de
hidrocarburos, a costa de las comunidades colindantes con los pozos de
extracción de gas. Recordemos que este método usa aproximadamente 800
sustancias químicas, de las cuales 650 son cancerígenas y la tercera parte
afectan el sistema nervioso, además de no conocerse los efectos sinérgicos de
los productos químicos usados en este método.
Ley de Hidrocarburos for export
La
brutal manipulación a la que nos tiene acostumbrado el régimen actual, nos
habla de las ventajas de la nueva Ley, que en realidad es una readaptación de
las normas jurídicas argentinas, sin cuestionar la linealidad que la reforma de
la Constitución del ‘94 significó en ese sentido, de la cual se mantiene su
sentido más estratégico, a las nuevas relaciones que tienen los estados
dependientes, a nivel mundial, con los giros en términos geoestratégicos del
actual modelo de acumulación capitalista y de cómo estas readaptaciones son
funcionales enteramente a los designios de este nuevo orden mundial. Es en este
sentido que la nueva Ley de Hidrocarburos, al unísono con la promovida
oficialmente Ley de Semillas, o ley Monsanto, marcan el sentido verdadero de la
legislación contemporánea argentina. Se podría decir, en este sentido que en
realidad es la Ley Chevron, porque son legislaciones orientadas para ser usadas
no sólo en Argentina.
La
necesidad de los centros de poder mundial, de acopio y apropiación de comoditties
baratos relacionados con la energía y alimentación a la vez (la soja es usada
también para la producción de biocombustibles), además de materias primas
especificas usadas en la construcción de parques energéticos adaptados al
mega-consumo de sus compañías,son dos puntos centrales en las disputas globales
por el dominio sobre la energía y los bienes naturales.
La nueva ley de hidrocarburos, es explicable también desde la perspectiva energética pura, pero no desde un vértice soberano, sino desde la dependencia, porque precisamente, quienes necesitan ampliar su matriz energética a escala global, no es Argentina,sino más bien las economías de enclave que son súper-usuarios de ésta a partir de sus mega-emprendimientos, pero así también, porque las corporaciones y los centros de poder mundial vienen prospectando una política de acumulación y exportación masiva de hidrocarburos desde los países dependientes.
La nueva ley de hidrocarburos, es explicable también desde la perspectiva energética pura, pero no desde un vértice soberano, sino desde la dependencia, porque precisamente, quienes necesitan ampliar su matriz energética a escala global, no es Argentina,sino más bien las economías de enclave que son súper-usuarios de ésta a partir de sus mega-emprendimientos, pero así también, porque las corporaciones y los centros de poder mundial vienen prospectando una política de acumulación y exportación masiva de hidrocarburos desde los países dependientes.
El
importante grado de disponibilidad que la reforma de la Constitución del ‘94 le
da a las provincias, y el rompimiento con el inalienable dominio sobre los
bienes naturales de la nación, formula una estrategia en el sentido de
negociaciones “por separado” con las corporaciones mundiales del rubro, pero
fundamentalmente porque esta estrategia, encuentra mejor argumento logístico en
la zonificación del mundo y sus territorios y el establecimiento de sus
factorías depredadoras itinerantes, acoplan el aceitado orden económico de las
llamadas economías de enclave y “diversifican” su poderío de manera múltiple,
en un mismo país a la vez.
Según Aranguren, de Shell, “Tener de socio a la provincia no es malo, porque ante problemas con el gobierno nacional por la importación de equipos o el incremento de las retenciones a la exportación, o con las comunidades locales y los sindicatos, es más fácil encontrar una solución si la empresa provincial participa” (Perfil, 24/8/2014). De la misma manera que la Ley de Inversiones Mineras homologa una legislación a pedir de las necesidades de las corporaciones del rubro, que en la gran mayoría de los casos son los mismos que el de las petroleras, la nueva ley lo es para el rubro petrolero y gasífero.
Según Aranguren, de Shell, “Tener de socio a la provincia no es malo, porque ante problemas con el gobierno nacional por la importación de equipos o el incremento de las retenciones a la exportación, o con las comunidades locales y los sindicatos, es más fácil encontrar una solución si la empresa provincial participa” (Perfil, 24/8/2014). De la misma manera que la Ley de Inversiones Mineras homologa una legislación a pedir de las necesidades de las corporaciones del rubro, que en la gran mayoría de los casos son los mismos que el de las petroleras, la nueva ley lo es para el rubro petrolero y gasífero.
La
llamada nueva ley, es en realidad consecuencia y parte de los acuerdos del
gobierno argentino con los organismos multilaterales de crédito, relacionados a
la deuda externa y el reciclado de esta; como el acuerdo con el Club de Paris,
donde uno de los puntos centrales son la inversiones en el sector energético y
las zonas sensibles para las corporaciones mundiales, como así también la
promoción de Shale de la mano de Chevron, como punto inicial de la mentada
soberanía hidrocarburífera que es más bien una burla.
Chevron es una de las tantas empresas movilizadas por la política de los Estados Unidos, como uno de sus modos, para que estas sean operadoras de áreas y/o prestadoras de servicios, no solamente para hegemonizar el rubro, sino también para reducir su dependencia externa; igualmente, su interés de diversificar sus fuentes de abastecimiento,se relacionan a la necesidad de contrapesar a otros productores de gran importancia como Rusia y generar una opción a otros proveedores “complejos”, como Venezuela, Oriente Medio y Noráfrica.
Chevron es una de las tantas empresas movilizadas por la política de los Estados Unidos, como uno de sus modos, para que estas sean operadoras de áreas y/o prestadoras de servicios, no solamente para hegemonizar el rubro, sino también para reducir su dependencia externa; igualmente, su interés de diversificar sus fuentes de abastecimiento,se relacionan a la necesidad de contrapesar a otros productores de gran importancia como Rusia y generar una opción a otros proveedores “complejos”, como Venezuela, Oriente Medio y Noráfrica.
La
nueva ley posibilita la integralidad de exploración y explotación de los no
convencionales en su conjunto a través de la expansión de otras áreas con alto
contenido de éstos, como la Cuenca de San Jorge, o la Cuenca Cuyana, que cuenta
además, con las llamadas arenas bituminosas.
En
el manual de operaciones adjunto a la agenda de dominación capitalista, en la
cual las corporaciones extractivistas son las mimadas del actual régimen,
Argentina tiene un lugar central; la Agencia de Información Energética
Estadounidense (EIA) tiene su propia zonificación de los espacios con alta
importancia estratégica, en el “Estudio Económico sobre Recursos
Convencionales, Shale Oil & Shale Gas en Argentina”. Tienen computadas y
constatadas certeramente, las estimaciones sobre reservas de no convencionales
en distintas cuencas del país.
La llamada nueva Ley de Hidrocarburos no modifica el actual esquema hidroenergético actual, por el contrario refuerza la dependencia cada vez mayor de nuestro sistema energético al poder transnacional y pone de rodillas a la Argentina frente a las corporaciones más poderosas del rubro del saqueo como Chevron, pero también pone de cara a la sociedad la verdadera funcionalidad de un modelo que cada vez tiene mayores resistencias a nivel mundial.
La llamada nueva Ley de Hidrocarburos no modifica el actual esquema hidroenergético actual, por el contrario refuerza la dependencia cada vez mayor de nuestro sistema energético al poder transnacional y pone de rodillas a la Argentina frente a las corporaciones más poderosas del rubro del saqueo como Chevron, pero también pone de cara a la sociedad la verdadera funcionalidad de un modelo que cada vez tiene mayores resistencias a nivel mundial.
BONUS TRACK
Daños colaterales del boom: los sismos
Sub-nota del artículo "Una nueva OPEP está naciendo: Estados Unidos" por New York Times especial para Clarín IEco 03/05/15.
"El Servicio Geológico de los EE.UU. divulgó en abril su primera evaluación integral del nexo entre miles de terremotos y la operatoria petrolera, mapeando 17 regiones en las que se han producido terremotos. El informe es la declaración más amplia hasta el momento acerca de un peligro que ha crecido junto la producción energética del país. Por lejos, el estado más afectado, según el informe, es Oklahoma, donde los terremotos son cientos de veces más frecuentes de lo que lo eran hasta hace pocos años, debido al descarte de agua residual de la extracción de combustibles y de pozos de perforación mediante inyección de agua en la tierra. Pero el informe también localizó zonas de otros ocho estados, desde el lago Erie hasta las Rocosas, donde dicha práctica ha causado sismos. 'En Oklahoma solía haber uno o dos temblores por año de magnitud 3 o mayor y ahora hay uno o dos por día', dijo Mark Petersen, el autor jefe del informe. 'Ahora Oklahoma tiene más temblores de esa magnitud que California'. El informe salió dos días después que el gobierno de Oklahoma reconociera por primera vez el consenso de la comunidad científica según el cual el descarte de agua residual relacionado con la perforación petrolera es causa del enorme aumento de temblores allí. El estado presentó un mapa interactivo que muestra la ubicación de sismos y de lugares donde se inyecta agua residual en el terreno. La fractura hidráulica, técnica de perforación mediante la cual se inyecta a alta presión una mezcla de agua y químicos en el suelo para romper rocas y liberar gas, ha atraído vasta atención. Pero la inyección de agua para eliminar los residuos de la perforación o la producción ha contribuido mucho más a causar sismos. El informe federal excluyó actividades humanas, como las excavaciones mineras, que puede provocar temblores pero no utilizan inyección de fluidos en gran escala".
Otras entradas sobre el tema en este blog:
20/09/15 Política energética K: corolario
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